Trabajando para una Persona

Hubo momentos en mi vida en que fui el encargado de algo y otros momentos en que trabajaba para una persona.  En cada situación uno puede estar contento porque el contentamiento es una decisión, no una posición.

Quiero dar unos consejos para aquel que trabaja para una persona (y para que sepas, no estoy escribiendo desde punto de vista del encargado porque también estoy trabajando para una persona). 

1.      Respetarle

Es importante recordar que es Dios quien le ha dado esa posición. Podría ser que llegó a tener esa posición por sus contactos, habilidades, etc., pero no te olvides que Dios le ha permitido tener tal posición.

Cuida tu actitud porque afectará tus acciones.

2.      Ayudarle

Tu jefe debe lograr mucho más con tu ayuda, si no es así tal vez no debes estar trabajando con él. Decide ser de ayuda para la persona que estás trabajando.

3.      No Des una Opinión que no se te ha pedido

Una buena regla para recordar es: El consejo no pedido casi nunca será bien recibido. No es tu responsabilidad expresar tu opinión o presentar tus buenas ideas.

4.      Si estás Pedido tu Opinión…

Dije que no debes dar tu opinión si no se te ha pedido, pero si se te pide tu opinión debes darla con sinceridad y respeto. No siempre es lo que dices, es el tono y forma en que lo dices. Un encargado nunca tiene que escuchar tu opinión, entonces recuerda que cuando se te lo píde contesta con respecto con tus palabras (no digas, “pienso que es una idea tonta”…), con tu lenguaje del cuerpo (moviendo los ojos en falta de respeto, cruzando las manos como si no te importa, etc.), y con tu actitud (de orgullo o falta de interés).

5.      Guarda tu propio Corazón

Tal vez recibirás crítica hacia tu persona, verás cosas en la vida del encargado que cuestionas o el encargado tomará decisiones que no estás de acuerdo, pero decide ahora que no pensaras negativamente y que no guardarás rencor.

He visto muy buenas personas que han sido lastimados o han estado en desacuerdo con un jefe y siguen enojados, amargados y lastimados por muchos años.

6.      Serle Leal, en Público y en Privado

Es probable y aun normal que otros te hablarán, dando sus quejas o desacuerdos del encargado, pero debes ser leal. No digo que calles cuando hay pecado pero en cuestionas comunes y corrientes debes serle leal a la persona para quien estas trabajando. Si no puedes ser leal, debes cambiar de actitud o de trabajo.

7.      Servirle con una Buena Actitud

Debes cumplir lo que te pide, estar presente cuando te necesita (aun fuera del horario) y hacer más de lo que se te pide

8.      Amar a su Familia

Tratar bien al encargado es importante, pero tratar bien y amar a su familia te hará que seas uno de las mejores personas en el mundo en ser apreciado.

9.      Ser Profesional en Todo lo que Haces

Debes ser tan bueno en lo que haces que sería difícil reemplazarte. Si haces bien tu trabajo, nadie va a querer que salgas.

Si Dios te quiere poner en otra posición, ¿estarás listo? Si haces bien tu trabajo, serás apreciado donde estés pero también estarás listo para otra posición si Dios te pone en otro lugar.

10.  Determina Ayudarle a ser Exitoso

Ten la actitud de que la persona o ministerio en que trabajas será exitoso y avanzará porque tú estás presente y trabajando ahí.

Para Servir,

 Jeffrey Bush

www.evangelismomundial.com