Quemando las Naves
Tal vez escuchaste las
historias antiguas de como los soldados quemaban las naves cuando llegaban a un
lugar para que nadie tenga tentación u opción de regresar. Aunque parece ser
buen ejemplo de valor en la batalla, no funciona en las relaciones con otros.
No tenemos que vivir mucho
tiempo para descubrir que algunas personas nos ofenden y las cosas no siempre
salen como quisiéramos. Un error muy común, en mi opinión, es nuestra reacción
a las personas o los problemas con las
cosas que nos suceden a nosotros – ya sea en una iglesia, lugar de trabajo, con
los amigos, etc. Cuando algo no sale como queremos, somos propensos a cortar la
relación con la persona o simplemente salir, pero “quemando las naves”, o
cortando el contacto, sólo hace que sea más difícil volver cuando sea
necesario. La manera Bíblica de manejar los problemas no es “quemar naves”, sino
ser humilde, tragarse el orgullo y seguir. Duele, pero cuando alguien te
menosprecia, te ofende, te trata injustamente o dispara cualquier vibración
negativa hacia tu persona, lo mejor es responder con buena actitud y no con
odio. Muchas veces he sido lastimado por correo electrónico o conversaciones
telefónicas, pero luego yo estaba muy contento de que no decidí “quemar las
naves”. Aquí hay algunas razones simples de por qué no “quemar naves” en la
vida:
1. Es Posible que los Necesitarás
un Día
Si un día necesitarás a la persona por cualquier razón, será muy difícil
volver de nuevo si previamente terminaste mal. Si la última vez que te reuniste
con la persona y concluiste en una buena manera, estarás feliz cuando llegue al
momento en que necesites de la persona.
2. Dios nos Dice no Responder
con Odio
La blanda respuesta apacigua la pelea, pero las palabras fuertes sólo
añadirán más leña al fuego. La Biblia nos manda a responder correctamente, no a
reaccionar con fuerza y “quemar las naves”.
3. Es Posible queseas Tú el que Estaba Mal
¿Alguna vez has estado enojado, totalmente indignado, sólo para descubrir
más tarde que fuiste tú quien fue el equivocado? Trate de ir hacia atrás y
decir lo siento después de haberte portado tan ridículo – eso requiere que tragues
tu orgullo. Por si a caso si fuiste tú
el equivocado (lo que sucede más a menudo de lo que queremos admitir), lo mejor
sería siempre actuar con bondad y no con dureza.
4. Otros están Mirando
Sean niños, amigos, otros cristianos u otros, siempre hay alguien
observando nuestras vidas. A pesar de que alguien nos lastime, enojarse y
“quemar las naves” no parecerá bueno ante los ojos de otras personas... aun si crees que
te hace sentir mejor haber ganado la discusión. Es mucho mejor que alguien te
mire y diga: "te maltrató, pero era increíble cómo reaccionaste de una
manera madura hacia ellos", en lugar de ver a alguien que reaccione mal y “quemar
las naves” de las posibilidades futuras. No sólo arruinas las posibilidades
futuras de recuperar a las relaciones, pero ahora se están cerrando las puertas
hacia los que te están mirando y piensan bien de ti. “Quemar naves” suele ser
una situación de perder-perder cuando se trata de trabajar con la gente.
Para Servir,
Jeffrey Bush
Comentarios
Publicar un comentario